IMPUNIDAD

Días de oscuridad... 

Días de maldad... 

Pero sobre todo. 

¡Días de impunidad! 

Esa es nuestra realidad... 

A nivel local y global, es lo mismo, argucias implementadas por leguleyos, sumado a la desvergüenza, la falta de escrúpulos, un profundo odio hacia lo diferente, y sobre todo, contra los más débiles a nivel social y económico, está convirtiendo nuestro otrora paraíso terrenal, en un infierno sin que lo notemos, debido al maremágnum de acontecimientos a nivel global que desborda nuestros sentidos. 

En todos lados, caen las caretas y la desvergüenza se hace presente, debido a la impunidad reinante, patrocinada por las transnacionales de la información, quienes se especializan en tergiversar hechos, acontecimientos y realidades, haciendo que lo bueno parezca malo y viceversa. 

En este sentido, las fuerzas y movimientos sociales que estamos comprometidos con la paz, la dignidad y la soberanía de los pueblos libres, debemos unirnos, dándole la importancia y la atención que merece la realidad que atenta contra la libertad,  y la vida misma de nuestros pueblos. 

La realidad, es que estamos frente a una cruzada internacional para regresar al pasado, donde el más fuerte dominaba al más débil, sin importar nada más que eso. 

La burguesía y la oligarquía internacional, está enfrascada en una ofensiva política afianzada en su fuerza mediática, para recobrar el poder, retomando viejos y arcaicos paradigmas, donde los derechos humanos y las libertades individuales son una utopía casi risible.

Estamos ante un peligro inminente ---no exagero---, muchos y muchas, piensan o afirman que debido a que vivimos tiempos modernos en los que las ciencias, la tecnología y la cultura,  han avanzado a pasos agigantados, no es posible que regresemos a épocas ya superadas. 

¡Quienes así piensan, incurren en un craso error! 

Recordemos el viejo dicho que reza: "El habito no hace al monje".

Quienes se presentan como adalides de la cultura, el saber y la tecnología, no están exentos de las perversiones, que encierra la mente humana, como la envidia y la maldad. 

Ejemplos hay por doquier, en nuestro hermoso hogar azul, al que llamamos tierra. 

Para no ir muy lejos en el tiempo, podemos citar el auto golpe que se infringió la OEA. En su afán injerencista para complacer los caprichos imperiales que pretenden implementar el modelo capitalista tutelado por los yanquis, aquí en la patria de Bolívar y Chávez. 

La impunidad da asco,  y es la madre de muchos males, por no decir, todos... 

Lo mismo ocurre en Argentina, donde un corrupto está destruyendo toda una nación o en Brasil, donde el voto de millones es desconocido ante argucias de leguleyos como afirme al principio de este artículo, implementadas para beneficiar a corruptos. De hecho, los impresentables señores Macri y Temer, están investigados, pero igual, ejercen el poder haciéndoles un daño terrible a sus pueblos diariamente con total impunidad. 

Ni hablar de la barbarie que se desata diariamente en la hermana patria Palestina, motorizado por el sionismo, ante los ojos de la humanidad entera. 

Quienes se dicen así mismos defensores de las libertades, son en realidad los promotores y actores principales de desafueros impensables, pero que son realidad, en medio de tanta modernidad, donde muchos piensan ---erradamente---, que es imposible que ocurran... 

Frases como "daños colaterales", son comunes en este mundo donde casi todo permanece y marcha al revés... 

"No se puede curar una neumonía con una aspirina"...

Se requiere mano dura, unidad verdadera y desinteresada, para revertir la maldad, basada en la impunidad que promueven los medios de comunicación derechistas, que alienan e infestan de odio a sus receptores, así como las falacias que diseminan los palangristas fanatizados, y quienes basados en su fama farandulera o deportiva, se prestan para diseminar mentiras que manipulan a los pueblos para que se conviertan en "carne de cañón".

¡Basta de impunidad, porque es la base de la maldad!

En la patria de Bolívar y Chávez, quienes se dicen defensores de la libertad y la democracia, son los fascistas de siempre, que conspiraron contra nuestro Comandante Eterno Hugo Chávez, participando inclusive en el golpe de estado del año 2002, y ahora, aplican la misma receta contra nuestro digno presidente constitucional, Nicolás Maduro. 

Esos son los efectos de la impunidad que debemos combatir sin pausa ni tregua, así como con fuerza y firmeza, porque con impunidad, no hay justicia.

Quienes hoy al igual que ayer, conspiraron contra la patria de Bolívar y Chávez, son los mismos apátridas que ante su cobardía, falta de ideas, y ausencia de liderazgo en la población, acuden a instancias internacionales al servicio del imperialismo, como la OEA. Para que ejecuten lo que ellos son incapaces de realizar por ineptos. 

Su actitud apátrida y servil, es sencillamente asquerosa, porque entregan a su patria y seguramente hasta a su madre, para complacer a sus amos imperiales. 

¡La impunidad que les ha asistido, debe desaparecer CARAJO!

Porque solo así cesarán las conspiraciones y el sufrimiento de un pueblo que solo desea paz, justicia y libertad.

¡Los desmanes promocionados el día de ayer, por la derecha fascista en Caracas, no deben quedar impunes!

¡La impunidad es la base de la maldad, recuérdenlo!

¡BASTA DE IMPUNIDAD CARAJO! 

¡Un abrazo Revolucionario y Libertario donde sea que se encuentren!


¡VENCEREMOS!


David  C.