viernes, 1 de marzo de 2024

REFLEXIONEMOS



Existen quienes son humildes, serviciales y sinceros....  

Pero, también existen los que son dañinos, traicioneros y rastreros...

El mal parece infinito, pero todo lo contrario, es voluble, inestable y más temprano que tarde, como en el pasado, caerá.

Es la historia de muchos imperios quienes se creían invencibles, nacidos para no desaparecer jamás... 

Su egolatría, narcisismo y aires de grandeza, les impedían ver la realidad... 

Así callo el imperio Romano, por mucho y comparativamente, el imperio más poderoso que ha existido. 

Su grandeza fue tal que se creyeron "ungidos por los dioses", y, por lo tanto, con derecho a hacer y deshacer incluyendo el derecho a decidir sobre la vida y la muerte. 

En la actualidad, no es diferente, solo que ya no se creen "ungidos o bendecidos por los dioses", sino por la tecnología y el poder económico que les permite como en el pasado, hacer y deshacer.

Durante ese hacer y deshacer, ocurren actos de barbarie y horror jamás imaginados en especial porque el desarrollo de la historia, la cultura, el arte y la filosofía son muy elevados actualmente, pero proporcionalmente a su nivel de desarrollo, son ignorados. 

Es así como observamos que los derechos humanos son simplemente tinta sobre papel, violada a placer por los poderosos, odiadores y asesinos de siempre. 

En el mundo actual, totalmente intercomunicado y conectado, donde la inmediatez de las noticias y acontecimientos no conocen de pausas o tiempos de espera, la impunidad más grotesca es la reina. 

Absolutamente, todo se sabe en cuestión de segundos a nivel global, pero así mismo todo es justificado, callado, ignorado o invisibilizado, por quienes en nombre de la libertad y la democracia cometen desmanes inimaginables para una mente sana y humanitaria. 

Hoy observamos como el avión Venezolano, secuestrado en Argentina y llevado ilegalmente (robado) a EEUU, fue destrozado a los pocos días de su arribo, no bastó con robarlo, había que destrozarlo para afianzar el sadismo de sus actos. Todo el globo sabe que ocurrió, pero pocos lo denuncian, la mayoría calla, hipocresía pura...  

El imperialismo y sus lacayos, hacen lo que les da la gana, la ley internacional es manipulada, administrada y aplicada a su antojo y conveniencia. 

Lo mismo ocurre con el genocidio en Palestina e igual con el Nazismo enquistado en Ucrania, es una "serie de horror" en la que cada capítulo es más vomitivo, asqueante y doloroso que el anterior. Todos lo ven, pero solo pocos hacen algo realmente útil. 

Así actuaron los imperios pasados, así sentenciaron su futuro y supervivencia. 

Se creyeron invencibles, casi inmortales, seres superiores, craso error... 

El poder del imperio Romano en su época, fue infinitamente más potente, afianzado, organizado e ideologizado que el del imperialismo actual  junto a sus lacayos europeos.  

Sus actitudes fascistas, liberales y nazistas basadas en un profundo odio de clases, originado a su vez en su egolatría y narcisismo, los lleva a pensar y sentirse superiores,  pero solo los conducirá a su extinción. 

La historia no cambiará y todo tiene su comienzo, pero también su final, quienes se creen superiores lo tendrán mucho más rápido, simplemente la vida es así y quien lo dude solo tiene que mirar la historia, inclusive, no hace falta profundizar, la historia contemporánea es suficiente para evidenciar lo que indefectiblemente ocurrirá. 

Quienes hoy se creen con derecho a asesinar, saquear, invadir e imponer a sangre y fuego su idiosincrasia y modo de vida sin respetar el derecho ajeno, caerán. 

¡Nada dura para siempre, la maldad menos!

Vendrán días duros a nivel global, muy posiblemente, será inevitable que muchos otros mueran y sufran, la historia es clara e indica que ningún cambio importante ha ocurrido en sana paz. 

Estas reflexiones no son un llamado al odio o la guerra, pero sí son un esbozo claro de la realidad actual y de lo que más temprano que tarde, sucederá. 

Estemos unidos para ser útiles y brindar protección, empatía y solidaridad a los más humildes y vulnerables que son siempre quienes más sufren ante los acontecimientos que muy posiblemente e igualmente muy lamentablemente, ocurrirán. 

Basta de injusticias, basta de imperialismo, basta de capitalismo, fascismo, sionismo y nazismo. 

¡Viva el amor! 


David C. 

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