POSDEMOCRACIA

Nada es para  siempre... 

Todo  aunque nos neguemos y no lo aceptemos, tiene un tiempo finito, jamás infinito... 

Los modelos que dan forma  y organicidad a las sociedades evolucionan, involucionan y desaparecen.

Muy a pesar de todos y todas,  debemos admitir la realidad:

La democracia como tal, esa que conocimos,  se agotó, muto, y cambió para siempre.... 

Las tecnologías informáticas, comunicacionales y propagandísticas, manejadas por la derecha internacional, influyeron en la democracia  de tal manera,   que los pueblos terminaron apoyando a sus verdugos,  dándole poder a fascistas cuya única inspiración es el odio y la maldad. 

Podemos afirmar en la actualidad que la otrora reluciente "democracia" fue secuestrada por la derecha mundial y es utilizada como herramienta básica de trabajo en el adoctrinamiento y la neurotización de pueblos y naciones para introducir el veneno del neoliberalismo que pregona el liderazgo de una clase "superior" ----la burguesa---, por sobre las grandes mayorías que solo "deberían" aspirar a ser sus sirvientes y en el mejor de los casos sus colaboradores.

El resultado final indica  que los pueblos son engañados y/o embaucado con falsas promesas, fantasías y personalismos que dan la impresión ---errada---, de orden, firmeza y probidad. Cuando los pueblos se dan cuenta,  ya es tarde, porque los fascistas han accedido  "legalmente" y "democráticamente" al poder. 

Por eso podemos afirmar que la democracia como la conocimos ya no existe, simplemente es una herramienta de manipulación adoptada por la derecha como su "caballo de troya" para implosionar a los pueblos

Vivimos una época de transición en la que la democracia ya no es la respuesta lógica para los pueblos que desean vivir en libertad, disfrutando y ejerciendo su soberanía.

Esta época podemos definirla como Posdemocracia,  porque ya no es la democracia lo que orienta y rige los destinos de las naciones y pueblos. Sencillamente se utiliza su nombre y prestigio para instalar nuevas formas de dominación 

La democracia fue infiltrada para que apoye o en el mejor de los casos encubra y justifique, contradicciones humanas  como la xenofobia, misoginia, racismo, homofobia y vicios como  el materialismo,  egoísmo y el neoliberalismo que promueve el imperialismo.

Las predicas basadas en conductas conservadoras y clericales,  profundamente retrogradas, son las que están en boga actualmente, viajando en el "portaaviones" llamado "democracia", debido a que el neoliberalismo y el imperialismo,  desean  personas y pueblos sumisos, obedientes que no defiendan sus derechos ni reivindicaciones, para que así,  puedan servir sin trabas a sus amos imperiales.

Fenómenos como los ocurridos con Trump, Macri y ahora  Bolsorano, no son fortuitos ni casuales, son un signo palpable de que el modelo democrático se agotó, porque fue infiltrado por la derecha y sus bases corruptas,  acostumbradas a que el poder económico y mediático  lo resuelve todo,  y si no se puede,  acuden a la coerción y el chantaje que les brinda su poder militar.

Como afirmé anteriormente, nos encontramos en un periodo de transición, lamentablemente desconocemos el futuro y el final del mismo,  afortunadamente nos tenemos los unos a los otros y otras,  estamos cada día más claros sobre cuales son los verdaderos intereses y objetivos de la burguesía y oligarquía apátrida que hoy gobierna en gran parte de la Patria Grande, desangrando  nuestros pueblos con su modelo neoliberal.

Parafraseando a Carlos Marx, todo indica que debemos progresar hacia la dictadura del proletariado porque la democracia fue secuestrada por la burguesía y la oligarquía, logrando plagar nuestros pueblos de hambre y miseria a nombre de la libertad.

Solo el pueblo salva al pueblo, Chávez lo afirmo,  y es la pura verdad, se impone la lucha de clases frontal,  pero no con balas,  sino con ideas, argumentos  y mucho humanismo,  para alcanzar un mundo inclusivo, donde reine la justicia social. 

Repito e insisto, disculpen la vehemencia: El tiempo de la democracia como  la conocimos,  acabó,  porque la derecha la infiltró y es necesario que los pueblos organizados alcen su voz en pos de la defensa de sus reivindicaciones socioeconómicas y la inclusión que debe ser el alfa y el omega dentro del humanismo que nos debe regir como seres humanos,  amantes de la paz  basada en el respeto al derecho ajeno. 

Democracia no es doblegar conciencias a través del dinero, no es engaño, manipulación, inoculación de odio, justicia amañada y corrupta,  mucho menos,  es sinónimo de  soborno y extorsión. 

Todo cambia, todo pasa, estamos asistiendo al final del modelo democrático, pero eso no quiere decir que los pueblos volverán a sufrir como en el pasado o que deberán doblegarse ante el poder imperial que promueve la hegemonía global. 

El final  de la democracia representa una oportunidad única para que  los pueblos que desean su verdadera emancipación,   reaccionen y se organicen en pos de la verdad, la inclusión, la igualdad y la justicia social, a través de una verdadera revolución que le devuelva todo el poder a los pueblos. 

Afortunadamente como lo afirme anteriormente,  nos tenemos a nosotros mismos y estamos cada día más organizados e interconectados  comunicacionalmente  a través de redes sociales y nuestra cultura que es amplísima, otra ventaja es que ellos son una minoría frente a nosotros que somos miles de millones globalmente.

Básicamente tenemos que impedir que más pueblos sean manipulados y embaucados para que en nombre de la "democracia"  apoyen a sus verdugos.

Construyamos un nuevo modelo blindado contra el odio y las bajas pasiones que dieron al traste con las democracias. Esta será nuestra misión y visión,  si deseamos liberarnos de las cadenas que hoy nos oprimen y que amenazan con esclavizarnos. 

No tengamos miedo a lo nuevo, luchemos contra la resistencia al cambio  y  mostremos nuestra disposición a aprender y evolucionar en pos de la felicidad de todas y todos en un mundo inclusivo donde reinen la paz. la libertad y el amor.

Un abrazo donde sea que se encuentren.... 


VENCEREMOS... 


David  C.