Dicen que los hechos y circunstancias a nivel social, político y económico que sucedieron en el pasado, son cíclicos, y de vez en cuando, se repiten.
Yo pienso, que los tiempos en ´política y a nivel social, son muy lentos y, aún nos encontramos en la etapa que vivió por ejemplo, el general Juan Domingo Perón, parte de su pensamiento quedo magistralmente plasmado en su obra del año 1968: "LA HORA DE LOS PUEBLOS".
Ya a 50 años de dicha publicación ---excelente por demás---, observamos que su temática está más vigente que nunca en la actualidad de la Patria Grande y más allá.
Los postulados anti imperialistas, en contra del neoliberalismo y el capitalismo, así como el ingerencismo yankee, plasmado en la obra de Perón, están allí frente a nosotros, listos para ser adoptados como forma combativa y emancipadora de nuestros pueblos.
Hoy observamos como el pueblo mexicano, dio un paso adelante en ese sentido y el pueblo brasileño está batallando para que las ordenes imperiales que mantienen secuestrado a Lula, sean defenestradas por injustas al carecer de toda evidencia que lo pueda culpabilizar judicialmente.
Debemos tener en cuenta que la derecha internacional cuando pierde arrebata y, solo la fuerza de un pueblo que este, verdaderamente decidido a ser libre, podrá doblegar a quienes aún pretenden mancillar nuestras soberanías, dignidad y voluntad.
Por tales motivos, hoy al igual que ayer, es de suma importancia la concientización de la población, a través del estudio de la historia e idiosincrasia de nuestros pueblos, para alimentarnos del espíritu indomable de nuestros héroes y mártires, quienes en el pasado lucharon contra los mismos intereses que hoy pretenden doblegarnos con políticas neoliberales, exacerbando el odio de clase y la xenofobia entre nuestros pueblos, para así mantenernos divididos.
Solo la unidad de nuestros pueblos nos hará fuertes, al punto de poder enfrentar al monstruo de mil cabezas ---el imperialismo yankee---, que añora convertirnos nuevamente en su "patio trasero", para utilizarnos a su plena conveniencia y placer.
Lula, recibió la orden de excarcelación pero, inmediatamente una contra orden ---obviamente dictada por el imperio---, le cerro la puerta a la libertad. ¡La fuerza del pueblo será mayor que el deseo imperial!
Estas consideraciones están orientadas hacia el ámbito de la Patria Grande latinoamericana, pero pueden ser adoptadas en cualquier lugar donde existan pueblos conscientes y deseosos de asumir su propio destino, sin más correcciones y orientaciones que la que ellos mismos se den.
Como Perón afirmó en el libro, "la historia de los pueblos es la lucha de los mismos contra los imperios", obviamente dicha situación no ha cambiado y hoy nos encontramos en plena batalla de baja intensidad contra el imperio yankee.
La injusticia social es el "Caballo de Troya" que doblega a nuestros pueblos, dispersándolos y debilitándolos moralmente, precisamente para que no luchen en pos de sus derechos. Una vez más y a riesgo de parecer reiterativo, debo afirmar que la solución está en los pueblos mismos a través de la capacidad de organización que tengan para combatir dichos males.
Quien no conoce la ideología capitalista que promueve el imperialismo, no puede luchar contra el mismo, por eso el llamado nuevamente es al estudio, la ideologización, y la convicción de que nada se logra si nos invade el individualismo y el egoísmo que el neoliberalismo promueve.
El grito de guerra jamás podrá ser: ¡"Sálvese quien pueda"!
Por décadas, hemos permanecido opacados, en otras hemos brillado de la mano de los Kirchner, Lula y Chávez, entre otros. No hemos sabido preservar ese brillo, pero los tiempos cambian y hoy tenemos la oportunidad de hacer honor a quien honor merece, a través de nuestra conducta diaria y hacer social.
La hora de los pueblos es ¡YA! No la dejemos pasar nuevamente...
Nunca más debe llegar a la presidencia de Argentina, alguien como Macri, cuyo accionar es claramente pro imperialista, porque sencillamente es un empleado de ellos. Su conducta raya en lo obsceno y apátrida.
En Brasil, nunca más debe acceder a la presidencia alguien como Temer, quien ni siquiera fue elegido por un error del pueblo, sino, por un golpe de estado maquillado de legalidad bajo apoyo ---obviamente--- del imperialismo.
Volvamos a las raíces, leamos a Perón, en su pensamiento encontraremos la fuerza ideológica para vencer a quienes pretenden esclavizarnos en toda la Patria Grande y más allá.
¡Un abrazo revolucionario y libertario donde sea que se encuentren!
Recuerden la frase clave: "Solo el pueblo salva al pueblo"...
David C.
Solo la unidad de nuestros pueblos nos hará fuertes, al punto de poder enfrentar al monstruo de mil cabezas ---el imperialismo yankee---, que añora convertirnos nuevamente en su "patio trasero", para utilizarnos a su plena conveniencia y placer.
Lula, recibió la orden de excarcelación pero, inmediatamente una contra orden ---obviamente dictada por el imperio---, le cerro la puerta a la libertad. ¡La fuerza del pueblo será mayor que el deseo imperial!
Estas consideraciones están orientadas hacia el ámbito de la Patria Grande latinoamericana, pero pueden ser adoptadas en cualquier lugar donde existan pueblos conscientes y deseosos de asumir su propio destino, sin más correcciones y orientaciones que la que ellos mismos se den.
Como Perón afirmó en el libro, "la historia de los pueblos es la lucha de los mismos contra los imperios", obviamente dicha situación no ha cambiado y hoy nos encontramos en plena batalla de baja intensidad contra el imperio yankee.
La injusticia social es el "Caballo de Troya" que doblega a nuestros pueblos, dispersándolos y debilitándolos moralmente, precisamente para que no luchen en pos de sus derechos. Una vez más y a riesgo de parecer reiterativo, debo afirmar que la solución está en los pueblos mismos a través de la capacidad de organización que tengan para combatir dichos males.
Quien no conoce la ideología capitalista que promueve el imperialismo, no puede luchar contra el mismo, por eso el llamado nuevamente es al estudio, la ideologización, y la convicción de que nada se logra si nos invade el individualismo y el egoísmo que el neoliberalismo promueve.
El grito de guerra jamás podrá ser: ¡"Sálvese quien pueda"!
Por décadas, hemos permanecido opacados, en otras hemos brillado de la mano de los Kirchner, Lula y Chávez, entre otros. No hemos sabido preservar ese brillo, pero los tiempos cambian y hoy tenemos la oportunidad de hacer honor a quien honor merece, a través de nuestra conducta diaria y hacer social.
La hora de los pueblos es ¡YA! No la dejemos pasar nuevamente...
Nunca más debe llegar a la presidencia de Argentina, alguien como Macri, cuyo accionar es claramente pro imperialista, porque sencillamente es un empleado de ellos. Su conducta raya en lo obsceno y apátrida.
En Brasil, nunca más debe acceder a la presidencia alguien como Temer, quien ni siquiera fue elegido por un error del pueblo, sino, por un golpe de estado maquillado de legalidad bajo apoyo ---obviamente--- del imperialismo.
Volvamos a las raíces, leamos a Perón, en su pensamiento encontraremos la fuerza ideológica para vencer a quienes pretenden esclavizarnos en toda la Patria Grande y más allá.
¡Un abrazo revolucionario y libertario donde sea que se encuentren!
Recuerden la frase clave: "Solo el pueblo salva al pueblo"...
David C.
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