Cada día hay más personas que comprenden él ¿por qué? De tantas cosas...
Afortunadamente, cada día son menos los que viven engañados...
Porque sienten o piensan que algo no cuadra o que hay cosas y situaciones fuera de contexto...
Quienes así sentimos o creemos, no estamos equivocados, quizás usted tampoco...
Lo que sucede es que el día a día es una mentira, donde la realidad es desdibujada, mimetizada y muchas veces invisibilizada, de manera grotesca por intereses transnacionales cuyo poder casi puede hacer que el día parezca la noche y viceversa.
Estamos sumidos en una inmensa ficción a la que llamamos cotidianidad y en la que nos desenvolvemos diariamente casi de manera inadvertida, porque desde muchos aspectos formamos parte de dicha ficción, la cual ha sido diseñada e implementada entre las grandes mayorías que hacemos vida en este hermoso planeta azul.
La ficción está basada en la internalización de que vivimos en un mundo de justicia y paz, donde impera el orden y la democracia, donde seres civilizados contribuyen al bienestar público a través del estudio y la implementación de nuevas tecnologías, precisamente para el beneficio de la humanidad.
Todo basado en la justicia que vela por los derechos de todos sin distingo y donde, si trabajas y eres "bueno (a)" te irá bien en la vida. ¡Mentira!
Si realizamos un estudio de opinión, encontraremos que las grandes mayorías de quienes viven en países "civilizados" y "desarrollados" creen en las premisas antes descritas y, por tanto, viven y mueren bajo sus ideales. Dichas personas solo viven bajo la ficción que el neoliberalismo, el capitalismo, el fanatismo religioso y los ideales que el pensamiento conservador les permiten.
Quienes miramos más allá, quienes nos resistimos a pensar que el mundo es tan simplista y vacío, tenemos la convicción de que la realidad es únicamente una simulación que no pocos han detectado, pero que por comodidad e intereses creados obvian, dejándose atrapar por sus vicios cuál droga adictiva.
Si escapamos a la ficción que muchos y muchas toman como realidad, observaremos un mundo turbio, desgastado, agotado, envenenado por el individualismo, egoísmo, xenofobia y una sed infinita de poder que no respeta fronteras ni ideologías, donde los monstruos de la discriminación y el odio hacia lo diferente, reinan apoyados por un entramado de complicidades casi infinita.
La realidad es que no existe ley internacional ni tratados que puedan respetarse y mucho menos cumplirse, la realidad es que instituciones como la ONU y la OEA están al servicio de intereses y particulares, la realidad es que el pez grande se come al chico sin que eso signifique ningún drama en un mundo idiotizado y neurotizado, donde cada quien se preocupa solo por sus intereses, mientras las psiquis son día a día envenenadas por el materialismo, el mercantilismo y las necesidades creadas por el capitalismo.
Palabras y frases como democracia, derechos humanos, justicia, dignidad y respeto al derecho ajeno, son solo una entelequia, utilizada de manera interesada y tergiversada para favorecer intereses y particularidades cuya motivación indefectiblemente es económica, porque en el mundo ficticio donde nos movemos diariamente, el dinero es el "dios" que todo lo mueve y puede.
Nos enfrentamos a realidades como el Coronavirus o Covid-19 que muy "casualmente" llegó para depurar las poblaciones en países pobres y destrozar las economías de competidores del imperialismo. Les recuerdo que no existen casualidades, sino causalidades; ---Las armas biológicas existen desde hace mucho tiempo---,
Estas reflexiones son traídas a colación para dejar sentado que si deseamos ser libres, dignos y soberanos, debemos escapar del mundo ficticio de risas, materialismo, consumismo, oropel, lentejuelas y neón donde estamos sumergidos desenvolviéndonos y mirar aunque nos aterremos, la tenebrosa realidad en la que se ha convertido el mundo donde vivimos.
Este artículo no busca neurotizar ni contribuir con la paranoia que ya algunos (a) sufren ante tanto oprobio e injusticias existentes globalmente y que nuestros pueblos sufren a diario como asesinatos de líderes sociales, femicidios, despojo de tierras, encarcelamientos injustificados, bloqueos y golpes de estado de los que todos y todas somos testigos, sin que instituciones o particularidades se inmuten.
Nos enfrentamos a realidades como el Coronavirus o Covid-19 que muy "casualmente" llegó para depurar las poblaciones en países pobres y destrozar las economías de competidores del imperialismo. Les recuerdo que no existen casualidades, sino causalidades; ---Las armas biológicas existen desde hace mucho tiempo---,
Estas reflexiones son traídas a colación para dejar sentado que si deseamos ser libres, dignos y soberanos, debemos escapar del mundo ficticio de risas, materialismo, consumismo, oropel, lentejuelas y neón donde estamos sumergidos desenvolviéndonos y mirar aunque nos aterremos, la tenebrosa realidad en la que se ha convertido el mundo donde vivimos.
Este artículo no busca neurotizar ni contribuir con la paranoia que ya algunos (a) sufren ante tanto oprobio e injusticias existentes globalmente y que nuestros pueblos sufren a diario como asesinatos de líderes sociales, femicidios, despojo de tierras, encarcelamientos injustificados, bloqueos y golpes de estado de los que todos y todas somos testigos, sin que instituciones o particularidades se inmuten.
Allí tenemos a Bolivia como la víctima más reciente de esta realidad. afortunadamente, su pueblo reaccionó positivamente.
El mundo está atrapado ante la impunidad e hipocresía asqueantes que todo pervierten y corrompen.
El reto está en unirnos cada día más para ser un solo pueblo y juntos defender el derecho a existir y ser libres, solos, será imposible combatir al monstruo que nos acecha. Recordemos que a nadie le importa el destino de un campesino o líder social en Colombia, un obrero en Nicaragua, a nadie le importa el niño que pasa frío en Argentina, a nadie que no seamos nosotros mismos, le importa que la hermana Cuba continúe bloqueada ante los ojos de un mundo que año tras año vota para que dicho bloqueo desaparezca, mucho menos importa que pueblos como el de España continúen siendo "súbditos" de un Rey.
¡Nos tenemos a nosotros mismos y, por tanto, solo con nosotros mismos debemos contar!
No somos los únicos que sufrimos los embates de las injusticias imperiales allí está la hermana patria Palestina o Siria asediadas, violadas e invadidas sin que nada suceda aunque sean miles o millones los desplazados o asesinados. La realidad de ellos debe ser una advertencia para nosotros porque si al imperialismo le da la gana, puede actuar igual o peor en nuestras tierras.
Ante dicha realidad debemos estar y enfatizo en ello: ¡UNIDOS!
Únicamente así, nuestras futuras generaciones tendrán la posibilidad de ser felices...
Disculpen si les parezco alarmista o demasiado vehemente en mis afirmaciones, solo trato de ser realista y advertir sobre lo que puede venir y en donde nos desenvolvemos.
¡Nada más me resta decirles que eviten a toda costa vivir bajo la ficción!
Un abrazo Revolucionario y Libertario desde la patria de Bolívar y Chávez.
David C.
El mundo está atrapado ante la impunidad e hipocresía asqueantes que todo pervierten y corrompen.
El reto está en unirnos cada día más para ser un solo pueblo y juntos defender el derecho a existir y ser libres, solos, será imposible combatir al monstruo que nos acecha. Recordemos que a nadie le importa el destino de un campesino o líder social en Colombia, un obrero en Nicaragua, a nadie le importa el niño que pasa frío en Argentina, a nadie que no seamos nosotros mismos, le importa que la hermana Cuba continúe bloqueada ante los ojos de un mundo que año tras año vota para que dicho bloqueo desaparezca, mucho menos importa que pueblos como el de España continúen siendo "súbditos" de un Rey.
¡Nos tenemos a nosotros mismos y, por tanto, solo con nosotros mismos debemos contar!
No somos los únicos que sufrimos los embates de las injusticias imperiales allí está la hermana patria Palestina o Siria asediadas, violadas e invadidas sin que nada suceda aunque sean miles o millones los desplazados o asesinados. La realidad de ellos debe ser una advertencia para nosotros porque si al imperialismo le da la gana, puede actuar igual o peor en nuestras tierras.
Ante dicha realidad debemos estar y enfatizo en ello: ¡UNIDOS!
Únicamente así, nuestras futuras generaciones tendrán la posibilidad de ser felices...
Disculpen si les parezco alarmista o demasiado vehemente en mis afirmaciones, solo trato de ser realista y advertir sobre lo que puede venir y en donde nos desenvolvemos.
¡Nada más me resta decirles que eviten a toda costa vivir bajo la ficción!
Un abrazo Revolucionario y Libertario desde la patria de Bolívar y Chávez.
David C.