Tiempo sin estar por aquí...
Le faltan horas a mis días y días a mis meses...
Una actividad sucede a la otra, un evento hace que se olvide otro y la vida transcurre como rio crecido y revuelto sin comienzo ni fin...
Quizás no les ocurre así, pero a mí sí.
Total ya estamos en las postrimerías de este año, por demás doloroso debido a la pandemia y muy revuelto políticamente aunque el balance es positivo para quienes amamos la vida y la paz, no solo aquí sino a nivel mundial.
En estos últimos días o meses (aún falta diciembre), les quiero dejar mi saludo sencillo y sincero, el saludo de alguien cuya filosofía de vida siempre estará del lado positivo, mirando siempre el vaso medio lleno y nunca medio vacío.
Siempre habrá esperanza porque están ustedes que son seres de luz para iluminar el oscuro y espinoso sendero que a muchos y muchas nos toca transitar.
El próximo año nos debe encontrar más unidos que nunca porque no serán pocos los retos y las vicisitudes que nos toque sortear, recuerden que la derecha junto a su eterno compañero el fascismo, no descansan y acechan en todo momento para hacer daño de formas inimaginables.
Les recomiendo la lectura diáfana, constructiva y altruista que refuerce el alma y los corazones en torno al amor puro y sincero que nos llevará a hacer el bien sin mirar a quien. La solidaridad y la libertad son directamente proporcionales a las convicciones que se tengan desde el punto de vista ideológico y humano eso se logra alimentando el espíritu con el estudio concienzudo y disciplinado.
Bibliografía sobre lo hermoso, humano y divino, hay por demás a nivel físico y digital, no recomendaré nada porque cada quien debe dejarse llevar por lo que su corazón y lógica le indique, pero no dejen de culturizar el alma y el espíritu.
Lo importante es que sientan el deseo, la motivación de ayudar y ser útil al próximo sin más interés que el bienestar ajeno. En el actual entorno donde nos desenvolvemos para muchos el buscar el bienestar ajeno sin recompensa alguna suena a utopía.
Cada día somos más los que luchamos por el bien común y por un mundo mejor, estoy seguro de que usted que me lee también está en este hermoso camino así que no es ninguna utopía.
La lucha por las reivindicaciones sociales no debe desmayar hay mucho que hacer desde las batallas feminista, hay mucho por hacer en apoyo a los movimientos LGTV. El capitalismo debe ser cosa del pasado y nadie debe ser perseguido por pensar distinto siempre que respete el derecho ajeno que lo asiste a él mismo.
Políticamente, hemos tenido victorias resonantes como aquí en la patria de Bolívar y Chávez y hace apenas un día la victoria en Honduras que en manos de una digna mujer, volverá al redil de la justicia social y la inclusión como modelo a seguir.
Hay mucho por hacer en países hermanos como Chile y Brasil actualmente secuestrados por el fascismo que aliena mentes y corazones para que las poblaciones apoyen a sus verdugos. El trabajo orientador y motivacional es básico en dichas naciones para que muchos y muchas abran los ojos y puedan ser libres para volar a la verdadera felicidad.
Ya llega diciembre mes típicamente secuestrado por especuladores y oportunistas que aprovechándose de la buena fe y la ignorancia de personas que adoptan como suyas culturas foráneas, hacen lo que les da la gana con precios y ofertas engañosas además de jugar con emociones y sentimientos ajenos.
No caigan en el juego de quienes solo buscan la riqueza fácil aprovechándose de sub culturas que adoran el capitalismo dado por un mercantilismo arrasador que consume hasta lo que no se tiene.
Desde este rincón al norte de la América del sur quiero agradecer sus comentarios, tiempo, apoyo y sobre todo sus aportes para que todos y todas crescamos y aprendamos un poco más y por ende seamos un poco más libres.
Recuerden: "El amor siempre vencerá al odio"...
Mis poesías en ocasiones reflexivas y en otras llenas de sensualidad y seducción lo afirman día a día...
Un abrazo revolucionario y libertario, cuídense por favor porque son más importantes de lo que imaginan, como siempre digo: Son luz en la oscuridad...
David C.
