En estos días turbios en los que el bien y el mal se mimetizan en la mente de algunos...
Algunos cuya egolatría es directamente proporcional a su inconsciencia...
Pensemos en quienes no tienen quien los escuche, los cobije, les dé un trozo de pan, piensen en los jamás recordados y siempre ignorados, esos que son utilizados y al final cual condones, desechados.
En estos días de pandemia, donde el mundo intenta protegerse muy a pesar de los ególatras que niegan o minimizan dicha realidad por temor a perder sus beneficios económicos. Los olvidados de siempre están peor.
Lo están, porque el mundo actual gira muy lamentablemente en torno a intereses económicos, donde los más vulnerables y excluidos, no tienen "arte ni parte".
Precisamente la pandemia por Covid 19 es de tal magnitud porque combatirla de manera eficaz y eficiente implica cesar la actividad de muchos medios de producción generadores de riquezas a las que los ególatras de siempre no pueden renunciar aunque se les valla la vida en ello.
El punto está en que no sólo es la vida de ellos ---los ególatras---, sino la de todos y todas, la que está en riesgo debido a la necesidad enfermiza de mantener su modo de vida dispendioso, superfluo y derrochador, para lo cual necesitan eliminar todo tipo de restricción social preventiva como las cuarentenas e invisibilizar la existencia y efectos de la pandemia por Covid 19.
Es doloroso que algunos o algunas solo piensan en la "necesidad" de cambiar su auto porque ya tiene un año de uso y es "obsoleto", pero jamás pensarán en el indigente que muere de frío en la calle o que no sabe qué comerá mañana. Esos y esas son quienes niegan ---acomodaticiamente--- la pandemia porque necesitan continuar en su mundo de oropel y neón donde son los reyes de lo absurdo.
Lo grave de ésta situación es que ya no ocurre solo a nivel individual, sino, colectivamente e inclusive son actitudes adoptadas por pueblos y naciones que se creen más importantes o con mayores derechos que otras, y por tanto, el injerencismo, así como las violaciones al derecho internacional están a la orden del día.
El capitalismo y el neoliberalismo con su estela de conductas y actitudes fanático-clericales así como la actitud conservadora totalmente desfasada de la realidad de algunos y algunas es lo que infunde nuevas directrices sociales y económicas de manera constante en pos de un mundo cada vez menos humano y mucho más superfluo y "plástico", donde lo primordial es alcanzar el mayor nivel económico, político y militar posible, lo cual lleva a muchos a mirar solo hacia arriba en pos de sus intereses y nunca abajo en pos de los que cada día tenemos menos.
Esto ha generado una paranoia global entre los egoístas y fascistas de siempre, cuyo egocentrismo los desdibuja y divorcia respecto a todo lo que se relacione con lo humano y natural. Dicha paranoia promueve una competencia desesperada por acceder a mayores recursos económicos que supuestamente repercutirán en mayor "felicidad" y bienestar social.
Por tal motivo es que vemos como es minimizado el peligro de la pandemia por Covid 19 aunque todos los días se reportan de manera creciente nuevos casos y fallecimientos, debido al mismo motivo observamos como aumenta y se radicaliza la xenofobia, el odio de clases, el racismo, así como el injerencismo económico y político de naciones que se creen policías del mundo con derecho a decidir quien es bueno y quien es malo o peor aún: Quien vive y quien muere.
Estas reflexiones ya casi terminando uno de los años más duros de la historia reciente, son para estimular y recordar qué nos motiva, nos une y mantiene hermanados aún sin conocernos personalmente, estando a miles de kilómetros de distancia e inclusive hablando otros idiomas.
Es sencillo...
Usted que me lee es humano o humana y se que al igual que a mi, le arde en el alma la realidad que día a día nos oprime al ser testigo de injusticias y delitos a nivel global que torturan la conciencia de seres como usted y como yo que amamos la vida y lo humano.
Eso nos une...
La lucha contra el egocentrismo, las actitudes ególatras, narcisistas, así como la soberbia y el egoísmo entrelazado por el fascismo de algunos.
Eso nos une...
Así como:
- El amor al próximo.
- La necesidad urgente e imperante de justicia social.
- El sueño de vivir en un mundo sano, libre de contaminación donde el conservacionismo sea la regla y no la excepción.
- La lucha contra el capitalismo, el neoliberalismo y el imperialismo.
- El nudo en la garganta que nos ahoga al concientizar el dolor ajeno.
- La sonrisa de un niño
- La belleza de un atardecer o un amanecer
- El amor de tú perro
- Hacer el bien actuando con justicia y equidad
- El sentirse y ser útil
- Amar y ser amado o amada
Saludos, compañero.
ResponderEliminarUd me hizo recordar una canción de Ali Primera "el que llena la barriga,se olvida del que no come"
El alter ego lo pudimos observar en su expresión más cristalina en los cierres de campaña, no cumplieron ningún protocolo para evitar el contagio del Covid19, plaga que está acabando con los humanos. Gracias por tener un espacio donde leerle.
Saludos amiga gracias a ti un abrazo!!!!!
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