MAÑANA

 

PARA MILLONES NO HABRÁ
PARA OTROS AL FIN LLEGARÁ 
MUCHOS LO DESEARÁN
NO TODOS LO DISFRUTARÁN
EL MAÑANA SIEMPRE LLEGARÁ
LUCHEMOS JUNTOS 
PARA QUE TRAIGA ALEGRÍA, AMOR Y PAZ... 

En estos tiempos de incertidumbre, ignominia y maldad, el mañana se nos presenta lejano, desdibujado entre penumbras que son más densas a medida que se avanza en el camino fangoso, solitario, misterioso y peligroso de nuestra realidad actual. 

Nada está dado por sentado, lo que hoy es, mañana puede que no sea, porque la sorpresa está en la próxima curva o detrás de la sombra más próxima del camino fangoso, sinuoso y lúgubre que nos toca transitar en esta realidad de la cual quisiéramos escapar. 

La realidad actual es la que nos muestra un mundo secuestrado por intereses mezquinos y mal sanos que una élite minúscula pero inimaginablemente poderosa desea implementar como modelo único de vida. 

Dicha élite permanece atenta, expectante, observándonos, esperando el momento propicio para atacar como los ojos que nos observan detrás de las penumbras en el camino fangoso que a duras penas transitamos. Las élites son quienes hacen el papel de titiriteros que mueven los hilos que hacen actuar a las marionetas que hoy detentan el poder en naciones e instituciones con poder decisorio y regulatorio supranacional. 

Las corporaciones y transnacionales son las élites a quienes me refiero, ellas poseen el poder para sugerir, empoderar y defenestrar presidentes de naciones a su antojo, así como diseñar, implementar e imponer políticas económicas y modos de vida siempre de manera ingerencista sin respetar culturas, soberanías e idiosincrasias de pueblos y naciones.

Marionetas como Trump, Bolsonaro, Duque, Piñera, Lenin Moreno o Almagro son quienes se encargan de que nuestro camino a un mañana promisorio y lleno de luz para todos sea tan difícil y peligroso de recorrer. 

Las herramientas para ejecutar los deseos de los titiriteros son sencillas pero eficaces entre ellas podemos destacar el capitalismo, el neoliberalismo y la neurotización de poblaciones y naciones a través de un odio de clase creciente y conductas negativas inoculadas por medios de comunicación y empresas dedicadas a la mercadotecnia que inoculan necesidades que promueven el consumismo además de conductas conservadoras totalmente desfasadas de la actualidad.

Si deseamos que nuestro camino deje de ser lúgubre, fangoso y peligroso, debemos combatir dichas herramientas, defenestrando de la psique colectiva vicios inoculados como la moda, el amor al poder y al dinero como "fuentes" de felicidad y tranquilidad o actitudes inseguras carentes de personalidad que llevan a millones a inmolarse moralmente, psíquicamente e inclusive sexualmente en pos de la aceptación social. 

El camino a un mañana promisorio estará libre, seguro y diáfano cuando la unión, la solidaridad, el amor al estudio y la cultura, así como el respeto al derecho ajeno sean la regla y no la excepción como hasta ahora. Es necesario promocionar a toda costa el humanismo  como fuente inspiradora y emancipadora. 

Mientras los egos, la soberbia, traición, maldad, así como las ansias de poder, el egoísmo y  fanatismos religiosos o conservadores  no sean suprimidos, será muy cuesta arriba alcanzar un mañana diferente a nuestro ahora. La incertidumbre nos acompañará en cada emprendimiento que realicemos ---negado---.

Siempre habrá un mañana hermoso y esperanzador para todos y todas, depende de usted, de mi y de todos que el camino para llegar a él sea más o menos sinuoso, amenazador, lúgubre y peligroso. 

MAÑANA DE LUZ
MAÑANA DE ENSUEÑO
SERÁ PARA TODOS Y TODAS
SI LE PONEMOS EMPEÑO
Y TRANSITAMOS UNIDOS 
ESTOS OSCUROS SENDEROS
PARA ALCANZAR LA LUZ 
ESA CON LA CUAL NACEMOS
LUZ DE VIDA Y AMOR
ESA QUE NOS MERECEMOS... 

 David C.