INTIMIDAD

 

Que difícil lograrla, alcanzarla... 

No es nada fácil confiar, entregar... 

En especial en estos tiempos en que nadie quiere dar, pero si quitar... 

Peor aún, robar... 

Lo cierto es que nuestra naturaleza es gregaria, por tanto, necesitamos vivir en grupos sociales, unidos por lasos, como; los familiares, ideológicos y obviamente por el amor, entre muchos otros. Nuestra naturaleza no es individualista, pues, no podemos vivir como ermitaños.

Lo antes expuesto, nos lleva a "intimar" con seres afines a nosotros, lamentablemente, cada día es más difícil lograrlo. Existen muchos intereses creados para que precisamente, sea muy difícil relacionarnos, comunicarnos y confiar los unos en los otros.  

La competencia desleal en pos de poder social, económico y político, "necesitan" al individualismo, el egoísmo y los miedos infundados, para alcanzar sus sueños, obviamente capitalistas y hegemónicos. 

Necesitamos volver al humanismo, liberar las alas y volar alto en pos de la felicidad como seres humanos, llenos de amor para dar y recibir, solamente así, podremos disfrutar de lo lindo de la vida que nos rodea, pero que muchas veces nos negamos nosotros mismos a observar y disfrutar. 

No se trata de confiar y entregar a ciegas, pero si de darse el permiso a sentir, vivir y compartir con quien deseemos, sin más interés que el de dar y recibir felicidad, tranquilidad, sabiduría y paz. 

Afirmó el Che: "Todo revolucionario verdadero está guiado por grandes sentimientos de amor".

¿Cómo hacer que esos sentimientos florezcan y se multipliquen sin intimidad?

Sencillamente, deslastrémonos del bombardeo mediático que promueve el individualismo y el egoísmo, no, nos hagamos eco de noticias catastróficas y de historias dolorosas que buscan neurotizar individualidades y poblaciones para que vivan con miedo y desconfiando siempre. 

Utilicemos la conciencia y nuestros cinco sentidos al momento de relacionarnos con alguien, pero no dejemos de hacerlo, porque solo así podremos fortalecernos como seres humanos y sociales con un destino común que debe ser y será de armonía, paz y felicidad. 

Quienes defienden el capitalismo y el imperialismo, siempre estarán en favor de la propiedad privada, el individualismo y el egoísmo porque se deben a su dios (el dinero), al cual, solo pueden acceder dividiendo, mintiendo, alienando, sembrando odio y desconfianza entre quienes nacimos para amarnos y apoyarnos. 

Nada más hermoso que poder confiar, poder compartir con alguien especial, para así disfrutar de la vida junto a esa o esas personas que amamos y respetamos, porque en ellas confiamos, depositando y brindando nuestra intimidad.  

Si se puede, nada más date el permiso, en el fondo estarás dándote tu propia felicidad. 

Un abrazo donde sea que estés... 

David  C.